As a growth-stage investor, I welcome unique new ways for companies to achieve critical mass. How a great idea gets to growth stage is irrelevant, as long as it is legal. My message is very simple: Crowd equity is a brand-new, untested concept. It may be a boon for the many valid business ideas that don’t appeal to venture capitalists. Or it may be a boondoggle. But if your idea has real chops and could potentially become an iconic company, it may be worth it to avoid the new unknown “force” until we all discover who Luke Skywalker’s dad really is.Como continuación a mis reflexiones sobre el crowdfunding, los "peros" del autor a este tipo de inversión son los "pros" que yo le veo ;-)
Creo que se resumen en "saber lo que haces" desde la confianza y con la meritocracia de respaldo. No se trata de invertir a ciegas sino de poder invertir fácilmente poco dinero pero on la intención de obtener un retorno o ver salir adelante un proyecto que opinas que puede tener futuro El autor haba del tamaño como determinante y, efectivamente, lo es. Puede que el crowdfunding tenga más sentido en pequeños negocios locales (SMBs en la jerga de las startups) que en grandes negocios hiperescalables basados en la innovación principalmente con nuevas tecnologías (IDEs –innovation driven enterprises–). Pero los pequeños negocios locales también retroalimentan con sus impuestos a la comunidad y crean una necesaria riqueza local.
Yo no creo que alguien vaya a invertir en algo en lo que no entiende… con el crowdfunding puede hacerlo a pequeña escala (invertir en lo que entiende o cree entender). Esa confianza en conocer al que inviertes hará que los "peros" del autor al crowdfunding se conviertan en "pros".
Lo que está claro es que el dinero esta mejor en las empresas que crean riqueza "real" (productos, servicios e impuestos) que en los bancos (donde sólo crean más deuda que según se ha visto hemos de resolver al final los contribuyentes).
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